Tik Tok.
3 minutos.
Solo tienes 3 minutos para dar un mensaje.
¿3 minutos?
¡Cuánta profundidad puede transmitirse en 3 minutos! - juzga mi mente.
Al juicio se interpone una imagen.
Un clavadista que con un impecable movimiento accede una gran profundidad en poco tiempo, sin salpicar una sola gota de agua.
Profundidad en poco tiempo. No es imposible - pienso.
Un mensaje en máximo 3 minutos:
Es fácil.
Ser feliz es muy fácil. Tener una vida plena y gozosa es muy fácil. Vivir es fácil. Amar es muy fácil.
Solo es cuestión de Ser lo que uno es y de vivir en el corazón.
¿Y cómo se hace eso?, ese si es un mensaje que toma más de 3 minutos.
Aunque si viviéramos en el corazón, la transmisión directa, incluso sin palabras, sería instantánea.
Pero ese es otro asunto, del que hablaré mas adelante.
En todo caso, si bien no es un mensaje de 3 minutos, es posible resumirlo en unas cuantas páginas. No hacen falta demasiadas explicaciones. Ni elaboradas teorías, ni sustentar en miles de autores cada una de las palabras.
Ya no.
No en esta nueva era.
Mi vida entera, (y sospecho que no solo esta), la he dedicado a ir a las profundidades explorando muchos caminos hacia ese Ser. A buscar la anhelada felicidad y plenitud.
Una búsqueda con laberintos largos y llenos de obstáculos. Viajes heroicos. Montañas de libros. Millares de horas de investigación. Recorridos por variados caminos andados por los grandes, y también por territorios vírgenes que no aparecen en los mapas. Travesías psicodélicas. Enseñanzas eclesiásticas. Largos silencios. Cantos estrambóticos. Danzas. Quietud. Arduos enfrentamientos con demonios. Paseos infernales. Vuelos gloriosos con duros despertares. Cuevas enigmáticas, bosques oscuros, océanos tormentosos, violentos huracanes, desiertos plagados de espejismos, paraísos repletos de trampas, escaleras cristalinas que terminan en nubes vaporosas.
Caminos de mérito, renuncia, sacrificio, pasiones, placeres, indulgencia y también castigo. De metas, y esfuerzo, de desapego y entrega.
Pruebas, errores, aciertos, engaños, ilusiones, dolores.
Nada fácil. Lo cierto es que no ha sido nada fácil.
No fue fácil, hasta que lo fue.
Hasta que se reveló un secreto, que nada tiene de secreto, porque ha sido el mismo mensaje transmitido por eones.
Todos los caminos señalan al corazón.
El mensaje, siempre lo supe. Descifrar ese mensaje, y llevarlo a la práctica de la cotidianidad más burda y cruda, esa ha sido la tarea.
Encontrar el camino, descubrir la puerta de ese portal que se aloja en nuestro pecho. Encontrar la llave que abre esa cámara secreta. Despejar un atajo. Descubrir la manera de permanecer ahí. O en su defecto de poder volver una y otra vez cada vez que la inercia me lleva por otros lugares. Repetirlo hasta saberlo de memoria. Hasta poder ir con los ojos cerrados. Probarlo y comprobarlo hasta que la duda desapareciera.
Y luego entonces poderlo compartir.
Como se comparten esos atajos de los juegos de video.
¿No es eso trampa? - juzga mi mente
No. No es.
Porque en esta nueva era una nueva comprensión me llega.
El descubrimiento de unos es el de todos. Somos una unidad. Este no es ya un juego individual.
De esto se trata este nuevo proyecto. Un proyecto que ha sido una larga travesía en sí mismo. Entregar en un mensaje corto, de esos que nos gustan ahora, un método rápido y fácil.
¿Método? - protesta mi mente.
Un método, sí.
Uno que tiene mucho de juego,
porque la vida es un juego.
Y ya es hora de que juguemos otro juego.
Este, es un método maestro que abre el acceso a infinidad de rutas posibles, con muchas opciones de personalización.
¿Rápido y fácil? - eso suena a estrategia comercial - sigue comentando mi mente.
Si. Porque amar es urgente. Porque nuestra existencia depende de que como humanos sepamos vivir desde el corazón pronto.
Porque la Era del Ser ha iniciado y no importa como lleguemos, lo que importa es que despertemos a una nueva realidad en la que nos sabremos ya iluminados. Nos reconoceremos sabios, y creadores, y podremos experimentar eso que por tantos años hemos considerado un sueño, una utopía, una ilusión poco realista.
Un mundo en el que ser feliz es muy fácil. Tener una vida plena y gozosa es muy fácil. Vivir es fácil. Amar es muy fácil.
Y Ser es más que suficiente.
"Ser es más que suficiente" ¡Qué regalo, Ana! Gracias infinitas por este espacio, por tu voz, por los atajos.